Valor sentimental
La situación en muchos pueblos es cada día más difícil y la despoblación parece imparable. Por ejemplo, Filignano, puerta natural de acceso al Parque Nacional de Abruzzo para quienes viajan desde Roma o Nápoles, cuenta hoy con 700 habitantes, y mira con nostalgia cuando hace solo 30 años llegaban a 3.000. Es decir, en menos de dos generaciones el pueblo perdió el 77 por 100 de sus habitantes. Filignano, de origen medieval, tiene sus encantos y en verano se anima gracias a los que añoran sus raíces y regresan a pasar sus vacaciones. Este aspecto sentimental es el que hace suscitar esperanzas para que tenga éxito la iniciativa de «renta de residencia activa». El gobierno de centro derecha de Molise confía plenamente en el proyecto, según el consejero Antonio Tedeschi: «Nuestro territorio se merece mucho más. Necesitamos infraestructuras. Es una iniciativa que responde a las aspiraciones de quien busca un lugar tranquilo donde andar y está dispuesto a dejar la ciudad. Esperamos que vengan ciudadanos no solo de Molise, sino también de otras regiones».
Cambiar estilo de vida
El consejero de la Junta regional ha escrito en Facebook: «Esta iniciativa ha nacido para poner freno al triste fenómeno de la despoblación. Somos conscientes de que las ayudas no son la panacea de todos los males, pero estamos convencidos de que pueden representar un primer paso hacia la revitalización de nuestros pequeños pueblos». La ayuda de 700 euros no pretende ser un regalo social: «Se trata de crear economía en el territorio y de atraer a nuevos residentes, estimulando también a personas de otras regiones que tienen ganas de cambiar de estilo de vida». Molise cuenta con joyas para mostrar como Scapoli, Fornelli, Pietrabbondante, Bagnoli del Trigno, Castel San Vincenzo… Pueblos que no deben morir. Molise quiere salvarlos de la despoblación.