El problema es que de las cuatro políticas a las que se refería el presidente, tres nacieron en EE.UU. y la cuarta tiene pasaporte de este país desde el año 2000. En referencia a Alexandria Ocasio-Cortez, cuya madre es de Puerto Rico; Ilhan Omar, que emigró de Somalia; Rashida Tlaib, cuyos padres son palestinos, y Ayanna Pressley, que simplemente es de raza negra, el presidente Trump dijo ayer en Twitter que «vienen de países que son una catástrofe total y completa, lo peor, los más corruptos e ineptos del mundo». «¿Por qué no se vuelven y los arreglan», añadió el presidente.
So interesting to see “Progressive” Democrat Congresswomen, who originally came from countries whose governments are a complete and total catastrophe, the worst, most corrupt and inept anywhere in the world (if they even have a functioning government at all), now loudly……— Donald J. Trump (@realDonaldTrump)
14 de julio de 2019La nueva provocación del presidente fue un exceso incluso para unos demócratas ya acostumbrados a esos exabruptos. La presidenta de la Cámara y líder de la oposición, Nancy Pelosi, respondió que lo que Trump quiere es «hacer de América un país para blancos».