Aprobada en 1970 para castigar a los delincuentes reincidentes, esta ley del estado de Alabama permitía sentenciar a cadena perpetua a los procesados por faltas menores. Y ese fue precisamente el fallo que recibió Kennard aquel año. El hombre entró en prisión para pasar allí el resto de su vida, sin posibilidad de libertad condicional.
Este miércoles, después de 36 años entre rejas, la situación de Kennard dio un vuelco de 180 grados. Tras una revisión de su condena, un juez ordenó su excarcelamiento, que ahora procesará el Departamento de Correcciones de Alabama.
I just witnessed the most extraordinary moment. Judge David Carpenter in Bessemer, AL has resentenced Alvin Kennard to time served after he got life without parole for robbing a bakery of $50 in 1983. He is now 58 & was 22 when he committed the robbery. pic.twitter.com/CYeWsnHmVG— Beth Shelburne (@bshelburne)
August 28, 2019 «Lamento mucho lo que hice», ha dicho Kennard antes de que el juez David Carpenter anunciara su decisión. «Asumo la responsabilidad de mis actos pasados. Quiero tener la oportunidad de hacerlo bien a partir de ahora», ha añadido.
Su abogada, Carla Crowder, ha asegurado que Kennard habría sido condenado a un máximo de 20 años con la ley actual. Además, todos los testimonios coinciden en que la actitud de Kennard en la prisión ha sido siempre ejemplar. Crowder ha denunciado que existen «cientos» de prisioneros en situaciones similares a las de Kennard, que siguen encarcelados porque no tienen abogados. «Es increíblemente injusto que los cientos de personas en Alabama sirvan la vida sin libertad condicional por delitos no violentos y sin homicidio», ha asegurado la abogada, según recoge ABC News.