El Mando Central de Estados Unidos ha explicado que la operación era contra dirigentes de Al Qaeda responsables de «ataques contra ciudadanos estadounidenses, socios y civiles inocentes». «Además, la eliminación de estas instalaciones reduce aún más su capacidad de perpetrar ataques y desestabilizar la región en el futuro», ha añadido el Ejército estadounidense.
Antes de la confirmación norteamericana, el Observatorio, organización con sede en Londres pero con una red de informantes en territorio sirio, había informado de la muerte de 40 yihadistas en un ataque con misiles contra una reunión de dirigentes de un grupo afiliado a Al Qaeda en Idlib.
Concretamente el ataque fue entre las localidades de Kafarya y Maarrat Misrin y el objetivo era la organización Huras al Din y otros grupos yihadistas aliados.
Este sábado ha entrado en vigor un alto el fuego para Idlib anunciado por Rusia -aliado del Gobierno sirio- y las partes han respetado tácitamente el armisticio.
Idlib es el último bastión de las milicias rebeldes sublevadas contra el régimen del presidente sirio, Bashar al Assad. En su mayoría está controlado por milicias yihadistas y grupos afines a Turquía.