El adolescente pertenecía a la «Tropa del infierno», un brazo armado del Cártel del Noreste. La Policía tenía la orden de combatir ese comando, algo que se produjo el pasado miércoles. Según informan varios medios locales, el menor viajaba en una furgoneta junto con otros sicarios cuando se produjo el tiroteo. Debido a la cantidad de disparos y la precisión de los mismos, Juanito acabó decapitado y otras diez personas murieron.
El joven tenía un amplio historial delictivo y era conocido en todo México. Apodado como el «Comandante Chikitín», se unió al cártel con tan solo trece años. Fue detenido por la Policía en 2015, cuando tenía esa edad, pero fue puesto en libertad poco después. A su corta edad, contaba ya con decenas de asesinatos a sus espaldas.
Tal era su popularidad que un grupo musical de género «narco rap» le dedicó una canción en la que cuentan su vida, incluyendo su ingreso en el cártel y sus inicios como sicario.